*El presente texto fue publicado, originalmente, por la revista mensual "EL ECO Filatélico y Numismático" en su número 1.227 de marzo de 2014. En él, su autor hace referencia al hallazgo de una moneda de oro en nuestro término municipal y, estableciendo paralelos con la que se muestra en el Museo Histórico de Teba, llega a interesantes conclusiones sobre el porqué de la presencia de ambas monedas en nuestras tierras. Desde aquí expresamos nuestro agradecimiento al autor por permitirnos la reproducción de tan interesante artículo.
-Portada de la revista. Se destaca el artículo a la izquierda-
La pieza que más adelante intento documentar, procede del Término Municipal de TEBA, una pequeña y bella localidad situada al norte de la provincia de Málaga encaramada entre las sierras de ‘La Camorra, El Camorrillo, San Cristóbal y El Castillo’.
La encontró un vecino el pasado verano en tierras de labor de su Término Municipal y es de oro viejo. Tiene 32 mm. de diámetro, pesa 4.6 g. siendo su estado de BC, pese a quedarle la señal inequívoca de haber estado doblada.
En cuanto a saber ante qué tipo de moneda nos encontramos, creo que se trata de un Chaise d’or de Felipe VI de Francia (1325-1350) que fue acuñado por tres tipos diferentes de anversos; a) presentando al Rey con vestimenta civil o militar, b) con imágenes religiosas como el Cordero Pascual y c) con insignias, sea escudo o corona. La que comento, se nos muestra con el anverso militar, y parece ser que fue emitida hacia 1346/48. Dicho monarca que accedió al trono a la muerte de su primo hermano Carlos IV de Francia y I de Navarra, no dejo heredero varón por estar implantada la ley sálica. Al no ser Felipe ni descendiente ni heredero de los Reyes de Navarra, restituyo el reino asumido a la heredera legítima Juana II, que caso con Felipe III el noble, de cuyo matrimonio nació Blanca de Evreux quien a su vez, casó en 1349 con el rey Felipe VI, que falleció seis meses después. Ella fue reina consorte de Francia, pero ambos, no de Navarra.
-Anverso y reverso de la nueva moneda-
Descripción:
Anverso.- Dentro de una circunferencia concéntrica de perlas y entre una pequeña cruz patada que abre y cierra la leyenda en latín, PHILIPPVS (dos pequeñas cruces en vertical) DEI (pequeña cruz), en el exergo a izquierda y derecha de GRA, (sendas cruces), nueva cruz poco visible, FRANCORVM, (las dos pequeñas cruces en vertical) y REX. En el centro del campo y dentro de una nueva orla formada por 8 arcos polilobulados en cuyos vértices exteriores aparece una pequeña cruz, el rey coronado y sentado en un gran sillón o trono gótico mirando al frente empuñando una espada con la diestra que apoya sobre el hombro, mientras que la izquierda lo que la izquierda lo hace sobre el escudo de armas de los Valois. A sus pies y sobre una especie de cartela, seis pequeñas cruces en línea.
Reverso.- Como en la anterior cara pero separando las palabras dos pequeños circulitos concéntricos en vertical, la leyenda: XPC VINCIT XPC REGNAT XPC IMPERAT, (Cristo vence, Cristo Reina, Cristo comanda) y en el campo, dentro de una doble orla paralela de cuatro glóbulos formada de trazos lineal la una y perlado la otra, pintoresca y bella cruz griega flordeslisada formada igualmente con perlas que es rematada en sus extremos y en el centro con pequeñas cruces cuadrilobuladas, de las cuales a su vez salen ramilletes de tréboles pedunculados de tres hojas. Y para terminar, decir que en cada uno de los vértices exteriores que unen los semicírculos de la orla paralela del campo, pende una flor de lis o trébol, mientras que en los del interior, son hojas de arce. Por lo que respecta a la ceca de procedencia, creo que cada una de estas oficinas disponían de una contraseña o signo secreto que intercalaban en las leyendas, como bien pudieras ser los circulitos y cruces pequeñas que antes se han descrito.
-Anverso y reverso de la moneda que se expone en el Museo de Teba-
El motivo de traer a colación este hallazgo han sido dos; El primero, por la curiosidad que me ha despertado el hecho de haber sido encontrada a escasos metros y en el mismo lugar en el que hace unos 20 años apareció la que se exhibe en el Museo Arqueológico de Teba, que es prácticamente igual, salvo en que algunos signos y letras de las leyendas de ambas caras son más enrevesados, y en que el oro, por su color, parece haber sido sometido al fuego. El diámetro es de 28 mm., el peso 4.5 g. y su estado el de BC. En cuanto a la diferencia respecto a la recientemente encontrada, se halla en que el espacio de separación de palabras en la leyenda de ambas caras, lo ocupan solamente pequeñas cruces o tréboles de cuatro hojas en el mismo orden y cantidad, siendo esta desigualdad en los signos la que nos hace suponer como señal inequívoca, de que ambas piezas corresponden a distintas cecas.
Y el segundo motivo, es el intentar conjeturar, cómo y cuando llegaron a estos predios rústicos estas dos preciosas monedas francesas, LAS CUALES INTUYO QUE NO DEBIERON SER LAS ÚNICAS QUE SE PERDIERON O CAYERON A LA TIERRA POR AQUELLAS FECHAS.
-Cuadro de José Luis López Rambla sobre la Batalla de Teba expuesto en el Museo de Teba-
Veamos; Releyendo la Historia de esta Población, visionando catálogos de subastas, así como también, consultando algún que otro libro asequible de autores que estudiaron la época medieval del SW de Al Andalus, he sabido que durante el reinado de Alfonso XI de Castilla, (1325-1350) amen de haber puesto cerco y conquistado en el año 1330 el castillo de la Estrella de esta localidad, (Teba) emprendió grandes campañas contra los moros del sultanato de Granada, a la vez que con todo su afán, se puso como objetivo prioritario tomar la plaza de Gibraltar (perdida en 1333) para así controlar el estrecho. Entre estas batallas podemos destacar, la del Salado en 1340, la toma de Algeciras 1344, y el sitio a Gibraltar, donde falleción de la peste. Para acometer todas estas guerras contra el invasor, sabemos que nuestro denodado paladín tuvo que recurrir a veces a coaliciones y pactos previos con otros reinos e incluso a solicitar la ayuda económica y militar de familiares y caballeros allende la frontera como, alemanes, ingleses, franceses, e incluso al Papa, el cual pidió en más de una ocasión la Bula de Cruzada.
Por cuanto queda dicho deducimos; a) Que el Rey Felipe y Alfonso, fueron prácticamente coetáneos en sus reinados. b) Que no se trata de una moneda franco-navarra; es francesa. c) Que aunque se pactó, Felipe no prestó ayuda militar a Castilla. d) Que por las fechas conocidas, dichas monedas no la pudieron traer las tropas extranjeras que ayudaron al Rey Alfonso en las batallas de Teba, El Salado ni Algeciras, pero sí cabe la posibilidad de que fueran portadas por los caballeros franceses que acudieron al cerco de Gibraltar.
Otra posibilidad pudiera haber sido, que algún que otro caballero las hubiesen perdido o extraviado en alguna de las muchas escaramuzas, algaradas o razias en todas sus acepciones que por estos campos, a la sazón frontera y tierra de nadie, sostuvieron los ejércitos aliados contra el invasor, tanto el mando del Rey Alfonso, como posteriormente por su hijo Pedro I.
BIGLIOGRAFÍA:
-Biblioteca Digital Mundial-Unesco.
-Catálogo de la Compagnie Generale de Bourse. 35. Paris.
-Martínez Enamorado, Virgilio. El bajo Guadalteba: Espacio y poblamiento.
-Ortiz Lozano, Francisco. Historia medieval de la tierra de Málaga. Musulmanes y Cristianos en el Valle de Ardales.
-Varios. Interrogatorio para la confección de Mapa/Carta geográfico-arqueológica-histórica de la Villa de Teba. Arzobispado de Sevilla, año 1788.