Un torero, por supuesto, de Teba... (Por Alonso Escobar Castillero)

09/09/2012
 

*El presente texto fue publicado, originalmente, en el Libro de la Feria de Teba de agosto de 2012. En él su autor hace una breve semblanza de un torero natural de nuestra tierra, Antonio Arroyo Corral, cuya carrera taurina transcurrió allá por los años 70 del pasado siglo

Decía alguien por ahí que la persona sin un conocimiento de su historia pasada, sus orígenes y su cultura es como un árbol sin raíces. Para nosotros sería muy difícil llegar a ese máximo conocimiento, ya que la historia que nos precede es, como poco, extensa y prolífica en hechos y personajes. A veces entre esos personajes hay gente muy anónima y que, sin embargo, de alguna forma destacaron por su vida o su ocupación y llevaron el nombre de Teba por todos sitios.

Por pura casualidad cayó en mis manos cierta información sobre un paisano nuestro que había pertenecido al mundo del espectáculo, concretamente al mundo de los toros. Y es así como efectivamente, descubrí que, como no podía ser de otra manera, también Teba dio un torero…

Y no hay mejor relato que el que te cuenta el propio personaje del mismo. Y tampoco hay mejor marco que este Libro de la Feria para contarles su biografía. Aunque como una persona lo más normal del mundo y viviendo en el máximo anonimato, me puse en contacto con él y me dio a conocer unas pinceladas de su vida.

Hablamos de Antonio Arroyo Corral, conocido en el mundo taurino como Antonio Arroyo “El Tebeño”. Nació el 26 de abril de 1953 en Teba, concretamente en la calle Albarrada (entonces calle Algarín), hoy las casas nº 30 y 32, que por aquellos años eran una sola vivienda. Hijo de Juan Arroyo Pérez e Isabel Corral Corral, ambos miembros de familias muy conocidas de Teba: “los ramoncitos” por parte paterna y “los canela” por parte materna.

En 1960 se trasladó junto a sus padres y su hermano Ramón a vivir a Fuengirola a buscarse la vida, ya que según cuenta, el trabajo en el campo se vino abajo y la gente empezó a emigrar. Allí empezó a trabajar en talleres de cerrajería y luminosos. Eran tiempos en que los toreros y novilleros afloraban como setas. La zona de Fuengirola, Mijas, El Palo (Málaga), etc. eran sitios en donde los chavales soñaban con ser algo en la vida, y ser algo en la vida entonces era para ellos coger la muleta y poder tirarse a la plaza algún día.

Entabló amistad con toreros ciertamente famosos y consagrados de entonces, como Antonio José Galán o Miguel Márquez. Y es así como por esta amistad y por su afición decide dedicarse profesionalmente al mundo taurino. Sus padres no tuvieron que hacer grandes esfuerzos económicos para sacar al chico adelante, sino que fueron sus apoderados, gente bastante adinerada, quienes le ayudaron. Tuvo varios apoderados, entre ellos Antonio Aranda (propietario de la Churrería “Casa Aranda”, en Málaga). En cualquier caso, su primera corrida la pagó él con el dinero que ganaba trabajando.

Se vistió de luces por primera vez en Torremolinos el 26 de agosto de 1971. Vistió de azul y oro. Tuvo que pagar 10.000 ptas. de su bolsillo. Además, el traje se lo prestó su gran amigo Antonio José Galán, que hizo de chófer, de mozo de espada y también le dejó su casa para que allí se vistiera. Aquella primera corrida fue un triunfo que le permitió repetir muchas ocasiones en multitud de plazas, sobre todo en la costa.

Toreó numerosas novilladas sin picadores y debutó con picadores en Alcorcón (Madrid) en el año 1976 junto a Lázaro Carmona y Rayito de Venezuela. Hizo aproximadamente unas 100 novilladas sin picadores y 8 con picadores. Tan sólo toreaba 4 o 5 corridas todos los años. Según cuenta Antonio, era muy, muy difícil llegar a ser figura del toreo. Y todos ellos, toreros y novilleros, prácticamente estaban eclipsados por las grandes figuras de la época: Manuel Benítez “El Cordobés”, Paco Camino, Diego Puerta y sobre todo Antonio Ordóñez. También otros menos conocidos, como Salvador Farelo, hoy día íntimo amigo de nuestro paisano.

Como a casi todos, la mili “lo partió”… Aquella carrera que comenzaba a dar sus frutos, quedó prácticamente truncada. Posteriormente se quedó a vivir en Madrid, donde estuvo 3 años, alternando trabajo y algunas corridas.

Toreó por última vez vestido de luces en una novillada con picadores en Vista Alegre (Madrid), el 28 de octubre de 1978. En su aventura sufrió varias cogidas, no sabe cuántas exactamente, algunos graves de las que le tuvieron que operar. Físicamente era delgaducho, los trajes no le encajaban; utilizó muchos y de colores muy diferentes, que iba alternando de plaza en plaza.

Después de todas aquellas andanzas, Antonio montó en Mijas-Costa un negocio de rótulos llamado “Luminosos Toro”, nombre que no es más que una declaración de intenciones de lo que quiso ser en la vida.

Nuestro torero está casado y tiene dos hijos: Miguel y Antonio. Hoy día, a sus casi 60 años, recuerda con alegría y nostalgia aquella etapa de su vida. Y de vez en cuando nos visita, la última vez en Romería, pues como era de esperar, lleva a su pueblo en el corazón. Antonio es un experto en tauromaquia; él dice que está siempre en contacto con el ambiente, va a multitud de plazas y mantiene una excelente amistad con multitud de toreros, con los cuáles se reúne para pasar buenos ratos. Su vida está plagada de anécdotas y hechos curiosos pero que por su extensión no caben en este programa.

Antonio sacó del baúl de los recuerdos un cartel muy especial, y es el que se incluye en este artículo. Se trata del cartel anunciador de los festejos taurinos que se celebraron en Teba con motivo de su Feria los días 10 y 11 de Agosto del año 1974, y en las que él participó.

 


La Plaza de Toros portátil se montó en el llano de la venta, frente al lateral de la Cooperativa olivarera. Era un entramado de tablas y hierros completados por carros y remolques de los campesinos. El evento fue organizado por nuestros vecinos ya desaparecidos Pepín Lora, Julián Cansino y otros. También se publica aquí una foto inédita de aquella corrida, y otra de “El Tebeño” en la misma, fotos que ha permanecido muchos años en el cajón de la casa de la suegra de quien suscribe…: y es que se da la circunstancia que nuestro personaje es su primo-hermano. Al fondo puede apreciarse la subida a Teba por el balconcillo.

El evento parece ser que fue de todo menos una corrida de toros, ya que hubo mucho desmadre, y la gente lo que quería era eso, máxima diversión para celebrar sus fiestas. Lo mismo intentaremos hacer nosotros.

Mi agradecimiento a Antonio y su familia por su historia y la atención prestada. Feliz Feria a todos.

Foto de Antonio Arroyo Corral publicada en la enciclopedia taurina
El Cossío. Tomo IV.

 

 

Plaza de Toros portátil instalada en el Llano de la Venta.
 Días 10 y 11 de Agosto de 1974.