El domingo por la mañana y tras dejar el hotel nos dirigimos a Cáceres donde llegamos en torno a las 10 de la mañana. Una intensa mañana monumental nos esperaba puesto que la ciudad cacereña tiene uno de los conjuntos monumentales más impresionantes de España, estando declarada Patrimonio de la Humanidad desde 1986. Tras llegar a nuestro destino, la guía Paloma comenzó a explicarnos los pormenores de la fundación de la ciudad en el denominado Foro de los Balbos, espacio adyacente a la Plaza Mayor en el que existía una antigua puerta de entrada a la ciudad romana de Norba Caesarina (de donde le viene el nombre actual a Cáceres). Tras ello nos fuimos hasta la puerta denominada Arco de la Estrella, lugar por donde entramos a la ciudad amurallada.
Hay que decir que el casco antiguo de Cáceres puede ser considerado uno de los mejor conservados de Europa y como tal fue declarado por el Consejo de Europa en un momento tan temprano como 1968 (tras Tallín y Praga). Recorrer sus calles es adentrarse en la Edad Media y así lo prueban sus palacios, plazas e iglesias, que conservan el regusto medieval hasta en sus más nimios detalles. Subiendo por la Calle del Arco de la Estrella llegamos hasta la Plaza de Santa María, lugar donde se enclava la Concatedral de Santa María. En los alrededores de esta pudimos admirar la Plaza de los Golfines con el famoso Palacio de los Golfines de Abajo y entramos a contemplar el interior magnífico del Palacio de Carvajal, con su característica portada con gran arco de medio punto, su patio renacentista y sus bellos jardines (en los que nos hicimos la correspondiente foto).
Posteriormente y tras tener la suerte de ser deleitados con un poco de flamenco en vivo, seguimos hasta la plaza de San Jorge, en la que destaca uno de los edificios religiosos más importantes de la ciudad: la Iglesia de San Francisco Javier, también denominada de la Preciosa Sangre. Tras ello nos dirigimos hacia el barrio de la judería, con sus empinadas y tipiquísimas calles, repletas de encantadoras casas humildes pero no por ello menos hermosas.
Tras seguir contemplando más calles y palacetes importantes, como la Casa del Mono o la Casa del Sol, llegamos a la Plaza de las Veletas, lugar en el que se encuentra el Museo de Cáceres. Ahí despedimos a nuestra guía Paloma, imponiéndole el pin de la Asociación y nos dispusimos a ver las magníficas piezas del Museo. En este destacan muy particularmente, la colección de estelas de guerrero de la rica protohistoria extremeña y un lugar tan típico como el aljibe árabe de la ciudad medieval.
Una vez finalizado el impresionante recorrido por las calles de la medieval Cáceres nos fuimos, siempre disfrutando del entorno patrimonial que nos rodeaba, hasta la Plaza Mayor, donde nos esperaban unas merecidas cervezas.
-Una de las múltiples fincas monumentales que existen justo a la carretera de Mérida y Cáceres y que se pueden ver desde el autobús-
-Llegados a Cáceres muchos aprovechan para hacer acopio de regalos para la familia. Nuestra amiga Mari Carmen nos muestra su buen humor-
-Oyendo a Paloma en el Foro de los Balbos-
-Nos disponemos a entrar en el casco antiguo a través de este Arco de la Estrella-
-El grupo en la Plaza de Santa María-
-En la misma plaza puede observarse una de las entradas con arco apuntado de la Concatedral de Santa María-
-Maqueta de la ciudad antigua de Cáceres que existe en el Palacio de Carvajal-
-Patio con arcos escarzanos del Palacio de Carvajal-
-Foto de conjunto en los hermosos jardines del Palacio de Carvajal-
-El Secretario y el Tesorero de Hisn Atiba siempre recaudando para "causas justas"-
-Celosía del Palacio de las Cigüeñas-
-Minutos de flamenco en la Plaza de los Golfines-
-Detalle del joven Maestro-
-El grupo en la Plaza de San Jorge-
-Imagen de grupo ante la Iglesia jesuita de San Francisco Javier-
-Hermosas calles las de Cáceres-
-Casas de la judería-
-Detalle decorativo floral en el Barrio la Judería-
-Paseando por las estrechas callejas medievales-
-En la puerta del Museo de Cáceres-
-El grupo junto a la Iglesia de San Mateo, lugar de enterramiento de la nobleza de la ciudad cacereña-
-El grupo ante la Casa del Sol o de los Solís (al fondo). Paloma nos contó cómo el fundador del linaje consiguió el título de nobleza, que tiene un sol como escudo, llevando un mensaje de la reina Isabel la Católica desde Cáceres a Valladolid en una sola jornada-
-Detalle de la preciosa Torre de Sande, de finales del siglo XV-
-Pasando ante la famosa Casa del Mono, lugar donde la leyenda sitúa unos hechos muy curiosos-
-Tras el recorrido nuestro presidente impone el pin de la Asociación a la guía Paloma-
-Nuestro tesorero y su hija en el Museo Militar-
-Magnífico Aljibe árabe sito en los sótanos del Museo de Cáceres-
-Una cerveza no podía faltar al finalizar el recorrido por el Museo-
-Callejeando al final de la visita guiada-
-Ya en la plaza mayor esperando el almuerzo-
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