Tras terminar la visita colegial nos dirigimos al edificio que queda en la zona baja de la Plaza de la Encarnación que no es otro que el Monasterio de la Encarnación, regido por monjas de clausura de la orden mercedaria que nos enseñaron los magníficos tesoros de arte sacro que atesora su monasterio. En primer lugar pasamos a su preciosa iglesia de una única nave con retablo mayor barroco en el que se venera la Virgen de la Merced. El patio del monasterio es, sin duda, uno de sus principales atractivos puesto que en él podemos contemplar un zócalo de azulejos sevillanos del Siglo XVIII que rodea todo el espacio, con escenas bíblicas, las estaciones del año, motivos callejeros, monterías, tauromaquias, etc., lo que nos da un auténtico retrato de la sociedad del Siglo XVIII. En torno al claustro principal destaca el Museo sacro compuesto por cuatro salas con una importante colección de Niños Jesús, distintas piezas de orfebrería e imaginería y otras muchas obras religiosas.
Concluida la visita de estos dos insignes monumentos nos dispusimos a visitar el Museo arqueológico de la ciudad, situado en la almohade Torre del Agua. Las diferentes salas con restos arqueológicos del pasado de Osuna están dispuestas en dos plantas. En la planta baja nos encontramos muchos materiales prehistóricos y distintas reproducciones de las importantes piezas ibéricas que se encontraron en Osuna a principios del siglo XX y que hoy están depositadas en el Museo Arqueológico Nacional de Madrid. La planta superior se dedica principalmente a las piezas de procedencia romana y visigótica, destacando las colecciones de cerámicas y ladrillos visigodos. También es destacable la amplia colección numismática.
Una vez terminada la visita al Museo nuestro guía nos condujo por las diferentes calles de Osuna ofreciéndonos muchos ejemplos del rico patrimonio etnológico de la ciudad en la que destacan un buen número de palacetes y casas solariegas que dan muestra del importante pasado de la villa ursaonense. Buena parte del recorrido transcurrió por la Calle de San Pedro, una de las calles más bellas de Andalucía, que ha sabido conservar un urbanismo respetuoso con la historia de la ciudad y de una monumentalidad sin par. Ya con la noche cayendo llegamos cansados pero satisfechos a la altura de la Universidad, donde nos esperaba nuestro autobús para llevarnos de regreso a Teba.
-En la entrada al Convento de la Encarnación con la monja mercedaria que nos hizo de guía-
-Preciosa nave la de la Iglesia del Monasterio-
-La Iglesia del Monasterio con su bóveda de cañón y su precioso altar barroco-
-Diferentes escenas compuestas en el zócalo de azulejos que rodea el patio del Convento-
-Patio renacentista del Convento-
-Nuestras famosas socias ante el retablo de la Virgen de la Merced-
-En el Museo Arqueológico-
-Réplica del Toro de Osuna. Escultura turdetana que se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional-
-Réplica de la Lex Ursonensis, ley concedida por Marco Antonio a los habitantes de Osuna en el 44 a.C. El original se encuentra en el Museo Arqueológico Nacional-
-Una de las salas del Museo con materiales romanos-
-La misma sala desde otro ángulo-
-El grupo a la salida del Museo-
-Nuestro tesorero en la puerta de los Juzgados sitos en el antiguo Palacio de los Cepeda. En Osuna hasta los edificios administrativos tienen solera-
-Plaza Mayor-
-Recepción del Museo de Osuna-
-La bellísima Calle de San Pedro-
-Portada del Palacio del Marqués de la Gomera, actualmente un Hotel-
-Otra hermosa casa de la Calle de San Pedro-
-Compra de productos típicos de Osuna-
-Iglesia de Santo Domingo-
-La Universidad-
Si quieres ver los videomontajes de las dos excursiones efectuados por nuestro vocal Paco Ledesma Guerrero haz click en el enlace correspondiente:
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